No había conocido el universo del sexo y sobrepasando el temor, se que de nada de lo que hice me arrepentiré. Llevo casada más de veinte años años y considero que a mis cuarenta y tantos años tengo todo lo que una mujer pueda desear, un esposo fiel, cariñoso y trabajador, un buen trabajo e independencia económica. Tal vez lo único que aún no tenga, son hijos, pero esa es una decisión que tomamos hace tiempo ante la imposibilidad que quedara embarazada. Me casé virgen por lo que mi esposo tiene total confianza en mí, ya que las chicas de mi edad eran más permisivas con sus novios en cambio yo nunca fui con otro hombre a la cama. Por supuesto que tuve algunos novios, pero con ellos nunca pasó de besos y caricias por encima de la ropa. Trabajo en un puesto de responsabilidad en una empresa multinacional y un día, mi superior directo me comunicó que tenía que ir a otra ciudad a hacer un curso de actualización con una duración de diez días. Ya en casa, le dije a mi marido que tendría que vi...
Si se escribe, perdura.